Cinco moscas azules. Una clase alta pero sola
Irónica novela entroncada con el realismo del XIX.
Tanto tiempo deseando una buena novela de la cotidianidad referida a la jet en su «posmoderna» interrelación con las nuevas clases dominantes, y cuando al fin aparece tenemos que sospechar de su autora: quién es, qué intenciones la animan a emprender la tarea de escribir esta novela, ¿es autobiográfica?, ¿se venga de alguien?. Como lector, no lo sé, ni me importa. Si algo convence en esta novela es que cumple de sobra esa finalidad de ficcionar verosímilmente la cotidianidad de un poderoso sector de nuestra sociedad, pero, además, con un valor importante a añadir: el tratamiento escritural es, por fín, literario.
Carmen Posadas echa mano de un estilo que entronca de lleno, precisamente, con el realismo decimonónico, no ya sólo español, sino otro mucho más universal vinculado con cierta tradición nuestra, para referirnos la soledad de esa amalgamada «clase alta» actual que gira en torno, y al margen, de los mass media.
Con una calidad estilístico-formal considerable, nos recuerda también de dónde venimos culturalmente los españoles. Pero no sólo eso; otras características se pueden suscribir: un uso correcto del lenguaje de la memoria; una convincente presentación física y psicológica de los personajes; una dicción fluida con una trama que atrapa desde la primera página y que recuerda al Dickens de Casa desolada.
Y se me ocurren otras buenas cualidades estilísticas, como el delicado y sutil tratamiento del tedio de las clases dominantes y un personal y sugerente uso de la ironía como recurso ficcional. Carmen Posadas ha bebido de diversas fuentes (desde el Truman Capote de Desayuno en Tiffany´s hasta esos modelos de crítica secular que son En busca del tiempo perdido de Proust y Retrato del artista adolescente de Joyce, pasando por la literatura que debe mucho a Wilde, Shaw, etc.) y ha leído bien, confirmando esa aseveración de Octavio Paz según la cual la Literatura se erige sobre los pilares que son la reescritura de las lecturas de otros autores, pasando de otras intenciones.
El mundo
Carlos Álvarez-Ude