Rusia es una tierra entrañable y creativa, pero también cruel

«Tengo de Toledo muchos recuerdos de mi infancia, cuando acompañaba a mi padre en las visitas que hacía a la ciudad en compañía de otros diplomáticos. También recuerdo mi sorpresa cuando lo vi por primera vez en la procesión delCorpus, acompañando a los caballeros del Santo Sepulcro, con las vestiduras verdes y la gola blanca en el cuello».

Toledo, explicaba ayer la escritora Carmen Posadas -que visitó la Biblioteca de Castilla-La Mancha para presentar El testigo invisible (Planeta), su última novela-, fue una de las ciudades españolas que ella recordaría en su etapa inmediatamente posterior, cuando la familia tuvo que desplazarse a la UniónSoviética, en cuyos albores se sitúa su último trabajo.

«La sociedad rusa primero te asombra, luego te escandaliza y, por último, te fascina. Son gente entrañable, cariñosa y muy creativa, pero también poseen una faceta cruel. Eso les hace capaces de lo mejor, pero también de lo peor que puede hacer el ser humano. Quizá por eso haya tantos excelentes escritores rusos, que alumbran Guerra y Paz o Ana Karenina a base de contar lo que transcurre a su alrededor».

Esta reflexión permite resumir el contexto histórico en el cual El testigo invisible transcurre: la caída de la decadente dinastía Romanov y el desencadenamiento de la Revolución Rusa, el paso de los suntuosos palacios de San Petersburgo a la estancia de Ekaterinburg en la que los bolcheviques pasaron por las armas al zar Nicolás II junto con toda su familia. Todo ello contado por el último testigo, testigo invisible, de aquellos trágicos hechos: un pinche de cocina de catorce años que salva la vida gracias a uno de los verdugos.

«Se trata de un episodio que ha sido reflejado en multitud de novelas y películas, y que ha generado también una enorme cantidad de mitos y de falsedades: ha habido decenas y decenas de Anastasias (personas que se apropiaron supuestamente de la identidad de la duquesa Anastasia Nikolaevna, una de las hijas del zar), así como diferentes zarevich (el heredero al trono imperial) que la historia ha demostrado completamente falsos». Según Posadas, «no hace falta inventar nada para recrear su final, porque la realidad acaba superando la ficción».

La escritora, que acudió a presentar la novela invitada por la Asociación de Libreros de Toledo, fue recibida ante los lectores por el periodista e investigador Enrique Sánchez Lubián, quien recordó que en 2013 se cumplen, precisamente, cuatro siglos desde la llegada al poder enRusia de la dinastía Romanov. Durante un breve encuentro con los medios, la escritora realizó un paralelismo entre la eclosión de la Revolución Rusa y el afán de regeneración de la sociedad española en nuestros días. «El 15-M me recordó a los movimientos asamblearios que surgieron en la URSS en sus primeros momentos: grupos que lucharon por un estallido de libertad, con afán renovador y ganas de cambiar las cosas, pero desprovistos de un líder. Sin una cabeza, estos movimientos se convierten en algo inoperante». ¿Cuál es su esperanza para el futuro del país? «Sinceramente, que quien esté mañana al frente sea una persona bienintencionada, porque nuestros tiempos se prestan tanto a los héroes como a los villanos».

fuente: latribunadetoledo.es

Contenido relacionado

Utilizamos cookies para asegurar que damos la mejor experiencia al usuario en nuestro sitio web. Si continúa utilizando este sitio asumiremos que está de acuerdo.Pulse aquí para conocer nuestra Política de cookies.

ACEPTAR
Aviso de cookies